BWT, empresa referente en la tecnología del agua y especializada en la producción y comercialización de equipamientos para piscina residencial y comercial, ofrece productos de control y desinfección tradicionales, sistemas automatizados de dosificación y electrólisis salina, siendo esta última una solución muy usada por su eficiencia y comodidad. Cada piscina es única y BWT ofrece soluciones para cada caso. Es el enfoque integral de BWT.

Dos escenarios, una solución integral

En el mercado actual coexisten dos grandes enfoques para el tratamiento del agua en piscinas:

  • Piscinas con tratamiento químico tradicional, donde se dosifican productos como cloro, reguladores de pH y floculantes.
  • Piscinas con electrólisis salina, donde el cloro se genera in situ a partir de sal disuelta en el agua.

Ambos sistemas requieren un control de diferentes parámetros como el pH, la alcalinidad, la dureza o el cloro, para asegurar la eficacia del tratamiento, así como la seguridad y la calidad del baño. En este contexto, BWT ofrece soluciones adaptadas a ambos escenarios, garantizando una gestión del agua eficiente y automatizada.

¿Por qué combinar química, electrólisis y control? Se estima que el 70% del tratamiento del agua en piscinas corresponde a procesos físicos (como filtración y circulación), mientras que el 30% restante depende de procesos químicos. Sin embargo, este 30% es crítico: una dosificación incorrecta puede comprometer la calidad del agua, la salud de los bañistas y la durabilidad de las instalaciones.

La electrólisis salina permite generar cloro de forma continua a partir de sal común, reduciendo la necesidad de manipular productos químicos peligrosos. Pero para que este sistema funcione de forma óptima, es imprescindible un control preciso de los parámetros del agua. Lo mismo ocurre con el tratamiento químico tradicional: sin una regulación automática, se corre el riesgo de sobredosificar o quedarse corto.

Soluciones para ambos enfoques

BWT ofrece soluciones para ambos escenarios. En el caso de optar por la electrólisis salina, la empresa recomienda el sistema Chlorplus 2.0 + Easy Dose, formado por:

  • Chlorplus 2.0. Sistema de electrólisis salina fabricado en España, con electrodos autolimpiantes de hasta 10.000 horas de vida útil. Su diseño compacto y configuración sencilla lo hacen ideal para la mayoría de las piscinas (Figura 2).
  • BWT Easy Dose. Línea de regulación automática de pH y control redox. Al integrarse con Chlorplus 2.0, permite ajustar la producción de cloro a la demanda real de la piscina, optimizando el consumo energético y prolongando la vida útil del sistema. (Figura 1).

Las ventajas principales que ofrece este enfoque basado en electrocloración son:

  • Seguridad: agua libre de contaminantes, sin necesidad de manipulación manual constante.
  • Simplicidad: instalación compacta, configuración intuitiva y mantenimiento reducido.
  • Eficiencia: producción y dosificación ajustada a la demanda real, lo que reduce el consumo y mejora la durabilidad del equipo.
  • Sostenibilidad: menor impacto ambiental gracias a la reducción de productos químicos.

Para piscinas que no cuentan con electrólisis, BWT ofrece un tratamiento químico tradicional junto a sistemas de dosificación automática de productos químicos. Es decir: BWT Easy Dose + gama de productos químicos:

  • BWT Easy Dose cloro y pH. Dosifican cloro líquido y regulan automáticamente el nivel de pH, asegurando la eficacia del desinfectante y el confort del baño.
  • Gama de productos químicos BWT. Incluye desinfectantes, reguladores de pH, floculantes, antialgas y productos de mantenimiento tradicionales, formulados para ofrecer máxima eficacia y calidad del agua (Figura 3).

Esta oferta permite cubrir todo el ciclo de tratamiento del agua, desde la desinfección hasta el equilibrio químico, adaptándose a las necesidades de cada instalación.

La multinacional BWT dispone y ofrece la solución adecuada para cada piscina mediante el uso de sistemas de dosificación automatizados o con electrólisis salina, garantizando la seguridad, la eficiencia y la sostenibilidad, así como el máximo confort para el bañista.